Viernes 2
Recogida de dorsal, breve paseo por la Feria y fiesta de la pasta , con la familia Clavero al completo, la cena en si, como ya nos habían avisado no fue nada del otro Jueves, vamos más bien cutre (4 hojas de lechuga,2 trozos de tomate y 4 aceitunas + 1 plato de pasta + 1 helado).
Sábado 3
Ya con la expedición casi al completo, se han incorporado de madrugada Dani y Sonia, paseo por la feria para realizar alguna compra de última hora, para más tarde ir a la reunión técnica, en la que no había nada nuevo salvo la confirmación de las horas de las diferentes salidas y alguna pregunta impertinente y graciosa, que hizo que pasásemos un rato de risas. Trote suave de 10 minutos para estirar. Después de comer y una buena siesta, fuimos a facturar tanto la bici como las bolsas con los materiales de bici y correr, estuvo todo muy bien organizado y sin aglomeraciones, entre otras cosas porque no hacían verificación de material, simplemente colocabas las cosas en su sitio y punto, nos enteramos bien del trascurso de las largas transiciones, así como de las entradas y salidas. Luego continuamos descansando y relajándonos en la playa, esperando a que llegase el último componente del grupo, Carlos de Miguel que se desplazaba desde Barcelona. Yo me encontraba muy tranquilo, se me había pasado la pesadez de piernas y esa sensación de que todo te duele y pude descansar y dormir casi toda la noche.
Domingo 4
5:50 piiiiii!!! Piloto automático. Estiramientos, baño , higiene, desayuno habitual, +baño y a la batalla. La mañana perfecta, buena temperatura, despejado, ausencia de viento y el mar en calma total, todo esto hace que los ánimos estén muy subidos. Tenemos mucho tiempo ya que Javier y Carlos salen a las 8:10 en la salida 7, y en la salida 8 saldremos Dani y yo a las 8:20, casi una hora después de los PRO que salen a las 7:30.
Natación: 3.8 km.
Al tiempo que Dani y yo estábamos tratando de visualizar el trazado de las boyas que debíamos seguir, los Pros ya salían del agua y el mar, según lo previsto se empezaba a mover un poco. Felipe Gutierrez de la FETRI nos informaba del tiempo que faltaba para salir, crono a cero y bocina. Empezaba la aventura esperada.
Salida muy limpia, solamente salíamos unos 190 triatletas por tanda, temperatura perfecta del agua y la claridad de la misma permitía ver hasta 5-6 metros de distancia, Dani enseguida se fue con el grupo delantero, yo me quede en el grupo perseguidor sin forzar y aun ritmo muy cómodo, me sorprendió que fue mucho mas fácil la orientación de lo que en un principio parecía desde tierra, creo que cogí unos buenos pies que me permitieron hacer un tiempo aceptable sin despilfarrar energía. Tiempo 1:07:29 Posición 426
T1 muy cómoda, un voluntario me ayudo en todo momento, me fue sacando todo de la bolsa y me guardó el neopreno, (hasta me puso la toalla en los pies), lo malo que perdí unos manguitos, seguro que no fue culpa de él, tenía cara de buena persona.
Ciclismo: 180 Km.
Empecé con fuerza y muchas ganas, pero recordando continuamente la última frase que me grito Roberto "controla la carrera", los primeros 40 km fueron rapidísimo a una media de 35 km/h. dí alcance a Carlos de Miguel, que había salido 10' antes, me comentó que me estaba pasando de ritmo y tomé la primera buena decisión del día y baje el pistón, Carlos subió un poquito y nos fuimos juntos, hasta que por el km. 130 a un juez no le pareció bien que dos compañeros de equipo fueran juntos y le hicieron parar 8', estoy seguro que los PRO circulaban mas juntos de lo que iba Carlos de mi. Por otro lado hay que decir que todas las modificaciones en el circuito y así como la abundancia de jueces hicieron que los temidos pelotones no apareciesen.
Javier Clavero me sacaba una ventaja de unos 30 ' y Dani Herrando de unos 15' marchando los dos a un ritmo similar estaban haciendo una carrera fenomenal.
En los últimos 40 km. trate de comer , beber y estirar un poco, dejando de ir todo el rato acoplado. Disfrute muchísimo durante todo el recorrido, con muy buenas sensaciones en general, se me pasaron los 180 km. volando. Tiempo real bici: 5h32'55 + 11'31'' T1+T2
Media: 32.43 km/h posición 607
Carrera a pie: 42.2 km.
Tras una transición normal, tomándome mi tiempo para no olvidarme nada: gorra, gafas, geles y bien de vaselina por todo y a por la maraton. Realmente ahora es cuando empieza la carrera, después de este pequeño calentamiento de 7 h. Son sobre las 15:00 horas (Marcel Zamora está a punto de terminar), los 2 primeros kms. me los tomo con precaución, realizando una valoración de mi estado general, me doy cuenta que no tengo ninguna molestia muscular, el pulso normal 140 pm y el estómago funciona perfectamente, decido correr por sensaciones, Roberto me anima pero me recuerda continuamente que no me pase, me cruzo con Javier Clavero y Dani que se interesan, como siempre por mi estado y yo por el de ellos, me encuentro fuerte y estoy disfrutando un montón, los primeros 20 km. por debajo de 2h. Este es el momento crítico de la carrera, las emociones me ciegan, los ánimos y gritos de la gente me engullen, las lágrimas me saltan, !!!si, estoy llorando!!! y en lugar de tratar de controlar la carrera, mantengo el ritmo e incluso el siguiente 10k me sale más rápido.
En el km 30 me caigo de la nube, he vendido la piel antes de cazar al lobo, he subestimado al triatlon más grande, comienzan los dolores abdominales y problemas gástricos, me veo obligado a bajar el ritmo drasticamente, en el km 32 tengo que abandonar la carretera para hacer una evacuación de urgencia, luego me entero que a Dani le ha pasado lo mismo, más o menos en el mismo sitio, Carlos ya hace un rato que está andando. Es cuando me pega el bajonazo, e incluso le digo a Roberto que no me deje apuntarme ninguna vez más, pero esto hay que acabarlo como sea, ando un km y troto otro, hidratando y comiendo bien, sobre todo no quiero acabar en una de las muchas ambulancias que van de un lado para otro, aún andando me pasan los kilómetros rápidos, del km. 39 a meta, por vergüenza torera, los hago del tiron trotando e incluso el último km. ya con la noche caída y con los sonidos de meta muy cerca, lo corro dignamente, llegando a meta eufórico y muy contento, pero con esa espinita clavada de no haber controlado la carrera,
SE HA CUMPLIDO EL SUEÑO.
He tratado de expresar lo mejor que he podido las sensaciones y emociones vividas, he puesto tiempos, marcas aproximadas y puestos, pero eso es lo de menos.
Un ambiente muy familiar entre los 97 participantes, ausencia de tensión y nervios, a diferencia con lo que pasa en Triatlones y duatlones, en la salida no nos ponen "a la orden de ningún juez" simplemente nos preguntan si falta alguien, si todos estamos bien, que tengamos cuidado porque el terreno esta bastante húmedo y que si nos parece empezamos y suena un silvato.
