miércoles, 10 de junio de 2009

Un día por los Pirineos

Bien abrigados nos dispusimos a empezar una bonita jornada de ciclismo, Juan Gonzalez, Octavio, Javier Clavero y yo, la mañana se presentaba con nubes y claros, la lluvia en un principio no era una amenaza pero los 7ºC que marcaban en la cumbre del Portalet hacia presagiar que mucho calor no se pasaría. Tras un largísimo descenso del Portalet, hicimos la primera parada para quitarnos ropa y afrontar las primeras rampas del Aubisque.

Al ser un puerto desconocido para mi, decidí afrontarlo con mucha cautela y mirando constantemente el pulsometro para mantenerme entre 150-155 pm, Juan y Javier enseguida se marcharon, el ascenso estuvo muy ambientado ya que estaba transcurriendo una cicloturista y continuamente fuimos adelantando a deportistas, al llegar a la estación me cogió Octavio y dio un acelerón y entonces decidí no parar y subir los últimos 4 km fuerte, recorte mucho a Javier que me sacó unos 30'. Muy buenas sensaciones y disfrute de un puerto muy bonito.
Una vez en la cumbre, nos dio vergüenza aprovecharnos del avituallamiento de la organización y solamente cogimos agua. (Si Robertico hubiese estado seguro que habríamos probado el queso, fuet, chocolate, etc...)


Cumbre del Aubisque





Bajada rápida y parada en el mismo punto para quitarnos ropa y afrontar los 30 km del Portalet, subimos agrupados hasta la presa, bebiendo y comiendo para afrontar los últimos 10km con un poco más de ritmo, pasada la presa y aprovechando el falso llano me puse en cabeza tirando generosamente con el viento de cara, quedando me solo en algún momento, hasta que a falta de 6 km. Juanito se fue solito y Javier, pagando los excesos del día anterior, se quedó a mi rueda; llegué a la cima muy, muy, muy justito, Octavio que supo regular muy bien, nos recortó mucho tiempo. Resumiendo, un día fantástico con 3 h de calidad y buenas sensaciones.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Victor , me parece que no estoy de momento para almorzar en el aubisque a no ser que me suban en coche y aun asi igual me mareaba . Vistas las imagenes la verdad es que aunque el dia no acompaño del todo ,podisteis disfrutar del entorno maravilloso y sobre todo de los buenos amigos. Que envidia me dais . Rober.